Pedro Molina (La Habana, Cuba, 1964) comenzó su viaje creativo a una edad muy temprana. Sin embargo, las convenciones sociales lo llevaron a dejar su pasión por la pintura a un lado, pero su alma seguía anhelando la expresión artística. Durante una beca de trabajo en la India descubrió el fascinante mundo de los Mandalas, inmerso en la rica tradición hinduista y budista. Posteriormente se encontró con la pintura y las tradiciones celtas en Escandinavia. Estas dos experiencias lo inspiraron a crear una fusión única a partir de estas dos influencias y retomar el dibujo y la pintura de forma autodidacta. Su creatividad floreció en un sincretismo que también refleja sus raíces caribeñas, además de ser un científico con una amplia experiencia en biotecnología, Pedro ha dedicado más de 20 años a perfeccionar su técnica y explorar los beneficios terapéuticos del proceso creativo de los Mandalas. Ha realizado varias exposiciones (Biarritz, Pamplona, Madrid o Murcia) y también imparte talleres de creación de Mandalas donde facilita a los participantes plasmar en papel lo que sienten, desde un espacio de calma interior.